jueves, 7 de febrero de 2008

Aprendamos a educar a la generación del mañana


Publicado en “Siete Días Yecla”


“Aprendamos a educar a la generación del mañana”

Invitado por las Asociaciones de Padres y Madres de los Institutos de Enseñanza Secundaria J.L.Castillo Puche y J.M Ruiz Azorin, recientemente, contamos en nuestra ciudad con la presencia de Emilio Calatayud Pérez, juez titular del juzgado de menores número uno de Granada. Un magistrado conocido por sus sentencias educativas y ejemplares. A los que no pudieron asistir a esta conferencia, como por ejemplo fue mi caso, les invito y animo a que hagan todo lo posible por verla, porque no tiene desperdicio. La calificaría de extraordinaria. Puesto que la charla fue grabada por Teleyecla, existe un material gráfico, no hay posible excusa o disculpa.
No es mi intención hacerles un resumen de lo que dijo Calatayud Pérez ni colocarlo en un altar. Pero sí les puedo decir, con toda sinceridad, que a mí sus palabras me hicieron reflexionar sobre lo que, a estas alturas, no abría que dudar ni discutir: “los primeros responsables, los titulares, de la educación de nuestros hijos somos nosotros, los padres”. Me parece que mientras no tengamos muy claro y asumido esto vamos por mal camino. Y nosotros, los padres, nos estamos equivocando. Está más que demostrado, pese a quien le pese. No estamos educando bien a nuestros retoños y mientras sigamos culpando, a unos y otros, pretendiendo que sean los demás los que asuman nuestra responsabilidad y deber como padres, estamos desperdiciando un tiempo y energía preciosos.
En mi opinión Emilio Calatayud fue muy duro, muy claro, muy sincero. Entre alguna que otra broma para relajar al personal, fue a por todas. No pretendía asustarnos ni desmotivarnos sino al contrario, abrirnos bien los ojos sobre lo fácil que resulta convertir a un niño en un auténtico salvaje. Sus palabras, las situaciones tan duras que describió, a las que el se enfrenta cada día, deberían de servirnos para reflexionar y replantearnos muchas cosas. Y tomar medidas ya. No esperar a que lleguen los problemas. No bajar nunca la guardia aunque de momento parezca irnos bien con nuestros hijos.

Una de las frases que llamo mi atención fue su invitación de ponernos, no en el papel de padre de la víctima, sino en el del padre del menor que comete el delito. El padre del hijo que ha maltratado, violado o asesinado. Pensemos un poco en esto. ¿Que estamos fomentando y transmitiendo en casa, con cada uno de nuestros gestos, comentarios, juicios y acciones?

Toda la razón del mundo le doy a este magistrado cuando dijo que “educar, educamos todos”. Por tanto la educación, es decir, las facultades intelectuales y morales que transmitimos a los menores, generación tras generación, creo yo que habría que analizarlas, trabajarlas, abordarlas y coordinarlas desde todos los frentes. Nadie está libre de culpa. O vamos todos a una o la vida se nos va a complicar mucho a todos antes o después. Como Emilio Calatayud  ha demostrado en su juzgado, la coordinación entre los diferentes estamentos es la clave para rebajar los delitos, reparar daños y reinsertar. Pues hagamos llegar las iniciativas que están dando fruto a quien corresponda, para que este modo de actuar se pueda aplicar a todos los juzgados, pero también extrapolar a otros ámbitos, como por ejemplo a los centros educativos. Y estudiemos también si otras ideas como podría ser compatibilizar los horarios laborales de los padres con los de los hijos, promoviendo por ejemplo las jornadas continuas o medias jornadas, sirven para conseguir que la conciliación de la vida laboral y familiar, de la que tanto se habla, sea real y efectiva y no quede solo en bonitos propósitos.

Pues aprovechando que estamos en campaña electoral, en el tiempo de las promesas y los anuncios de cambios y mejoras, quizás deberíamos de leer bien la letra pequeña de los distintos programas electorales y por el bien de nuestros hijos, ver quien o quienes están dispuestos a invertir más en educación. Reparando y subsanando, lo primero de todo, los experimentos que las distintas Comunidades Autónomas vienen realizando en materia de educación. Porque tal y como comentó el juez de menores de Granada el sistema educativo debe de ser un proyecto único, estable, no sometido a los vaivenes políticos. Coincido con él que fue un error transferir los temas educativos a las Comunidades Autónomas. Pidamos también más medios humanos, materiales y técnicos para formar equipos de profesionales que desde todos los ámbitos puedan orientar y ayudar a los padres en la tarea más complicada de todas, educar.


~ Delfina Marco ~